Astrolabio: Agenda Holística


25 de julio: Día fuera del tiempo


El 25 de julio es llamado "Día fuera del Tiempo" en el calendario Maya. Esto, en virtud de que el 26 de julio en el calendario Gregoriano coincide con la celebración del Año Nuevo Maya, un ciclo que se extiende hasta el día 24 de julio del siguiente año.
 
Para la cultura maya antigua, el tiempo de la tierra está en sintonía con las frecuencias del universo. Por eso, un año dura lo que para nosotros serían 13 meses de 28 días cada uno.
 
Este calendario, basado en las lunaciones, da un resultado de 364 días, dejando un día fuera. Este día se conoce como "el día perdido".
 
Ese día fuera del tiempo, el Sol se sincroniza con la estrella más brillante del cielo (Sirio) y empieza una revolución solar de la tierra. Sirio representa la intuición, el sol secreto. Por ello, ese día todas las energías del año se reúnen.
 
Para los mayas esto era muy especial, y por eso lo consideraban un momento óptimo para preparar el alma, purificar el espíritu, reflexionar y meditar antes de comenzar un nuevo ciclo.
 
Hay quienes sostienen que el calendario Gregoriano, que usamos actualmente por imposición del Papa Gregorio XIII, no está en sincronía con el tiempo del Universo, ya que contamos que la Tierra da la vuelta al sol por 365 días, y cada cuatro años sumamos un día más.
 
Eso da lugar a un desajuste que incide, según algunos creen, en nuestra percepción del entorno y la realidad en sí. Ello explicaría porqué la mayoría de las veces no somos capaces de sentir los cambios en la energía del universo y el planeta.
 
Nos cuesta sincronizarnos con fenómenos como los eclipses, las lunaciones y las fuerzas astrológicas y espirituales que abren portales de luz.
 
Se piensa entonces que si tomáramos un calendario más a tono con el ritmo del universo, como el maya, posiblemente podríamos empezar a percibir las sincronicidades que suceden en el entorno con mayor claridad.
 
Debido a que la fecha es comúnmente  utilizada para realizar rituales de limpieza y sanación con la Madre Tierra, también se conoce como "día verde".
 
El 25 de julio es propicio para sincronizarse con el planeta, celebrar la vida, el amor, la paz, y el arte, además de trabajar el perdón.

Tres círculos que representan el arte, la ciencia y la espiritualidad dentro de otro más grande que simboliza a la cultura, conforman el emblema de la fecha, que es la bandera de la paz. 

En este día, además, se recomienda plegaria a las siete direcciones galácticas en sentido contrario a las manecillas del reloj.

1. ESTE. Desde la Casa Este de la Luz, que la sabiduría se abra en aurora sobre nosotros para que veamos las cosas con claridad.

2. NORTE. Desde la Casa Norte de la Noche, que la sabiduría madure entre nosotros para que conozcamos todo desde adentro.

3. OESTE. Desde la Casa Oeste de la Transformación, que la sabiduría se transforme en acción correcta para que hagamos lo que haya que hacerse.

4. SUR. Desde la Casa Sur del Sol Eterno, que la acción correcta nos de la cosecha para que disfrutemos los frutos del ser planetario.

5. CIELO. Desde la Casa Superior del Paraíso, donde se reúne la gente de las estrellas y los antepasados, que sus bendiciones lleguen hasta nosotros ahora.

6. TIERRA. Desde la Casa Inferior de la Tierra, que el latido del corazón cristal del planeta, nos bendiga con sus armonías para que acabemos con las guerras.

7. CORAZÓN. Desde la Fuente Central de la Galaxia, que está en todas partes y al mismo tiempo, que todo se reconozca como luz de amor mutuo.




Fuentes consultadas

No hay comentarios.